Casa Palacio Minetti tiene la particularidad a nivel urbano de ocupar enteramente una pequeña manzana triangular. Es como una isla sobre la Av. Yrigoyen, en Nueva Córdoba.

En el marco de la estrategia de incorporación de nuevas locaciones para proyectar locales de la marca Rapanui, se buscaron como escenario principalmente casas como ésta, con historia, varias están catalogadas, son referentes barriales o con tipologías particulares, y se abren al público que está familiarizado solo a verlas desde afuera.

Abrir esta casa al público es una forma de entablar una relación con la comunidad. El programa funcional de Rapanui es básicamente el mismo en los diferentes locales, pero la posibilidad de expresar lo intangible está estrechamente vinculado a cada casa en particular.

Estas propiedades, con alta protección histórica, como varias casas catalogadas que el Estudio PilottoSanguinetti ha intervenido son residencias que conforman el paisaje urbano, edificios de calidad arquitectónica que necesitan una nueva función, difícil de encontrar ya que no obedecen a los cánones residenciales actuales, son muy caras para mantener y también para remodelar.

Buscamos un dialogo con lo que ya está presente en la casa para potenciar su identidad a través de una intervención contemporánea, de calidad articulando las distintas capas de proyecto- remodelación de la casa, interiorismo, paisajismo, exhibición de los productos y su presentación. Un gran concierto para poner en escena la marca.

Se han preservado todos los componentes de esenciales de la propiedad, por ejemplo todo el núcleo de escalera principal con un imponente vitreaux con escudo de armas. Este tubo de escalera se pintó en color oscuro para destacar estos magníficos ventanales.

Los cielorrasos han sido intervenidos por motivos técnicos y funcionales, pero siempre manteniendo las particiones originales. Los pisos de la planta alta han sido restaurados y son los originales. Los de Planta baja son nuevos, realizados con materiales tradicionales pero con diseño contemporáneo.

Los jardines triangulares, residuales resultantes de la implantación clásica del bloque de la vivienda al centro de la manzana, resultaban inaccesibles desde el interior de la casa, el uso del espacio exterior era en ese momento contemplativo, a través de las ventanas. Conectar los jardines con el interior de la planta baja era vital. Para este fin los auditores nos autorizaron transformar dos ventanas en puertas, una en cada salón de esquina que da al exterior, y revitalizar así esta conexión, generando circulaciones con distintos recorridos entre adentro y afuera, planta baja y 1er piso que permiten recorrer y conocer la casa.